Un corazón roto provoca un dolor que nadie quiere experimentar y que puede afectar nuestra vida durante mucho tiempo.
Si tienes que pasar por esto más de una vez, el dolor puede mezclarse y llevarte a un lugar oscuro y triste.
Tener el corazón roto varias veces no solo trae una increíble tristeza y negatividad a su vida, sino que también puede afectar su capacidad para sanar y dejarlo atrás.
Incapaz de dejar ir el dolor del pasado, queda atrapado en un círculo vicioso que nunca le brinda felicidad.
Si bien puede que no sea fácil de superar, el primer paso es darse cuenta de que ha caído en este agujero oscuro.
Luego, puede comenzar a trabajar en un plan sobre cómo volver a salir.

Aquí hay 14 señales de que su corazón se ha roto demasiado:
Contenido
1. Ocultas tu dolor y tristeza del mundo.
En lugar de admitir ante amigos y familiares que está en problemas, mantenga todo enterrado dentro de usted. Está decidido a hacerlo todo por sí mismo, incluso si le causa más dolor.
2. Luchas con una profunda sensación de soledad.
No es que no quieras dejar que la gente entre en tu vida.
Le encantaría hacer nuevas conexiones y no sentirse tan solo, pero no puede arriesgarse a sufrir más lesiones.

Te sientes solo y aislado del resto del mundo.
3. Forzas una sonrisa falsa en tu rostro todos los días, pero tu corazón se siente diferente.
Cuando la gente te conoce, lo primero que hacen es conocer tu brillante sonrisa.
Pero cuando te miran a los ojos, se dan cuenta de que tu suerte está fingiendo. En el fondo, estás lleno de dolor y tristeza.

4. Te sientes agotado todo el tiempo.
Cargar con ese dolor es agotador, física, mental y emocionalmente. Por muy cansado que se sienta, no puede dormir.
Te acuestas toda la noche pensando en las personas que te lastimaron y te preguntas si de alguna manera podrías haberlo visto venir.

5. Sientes que nunca podrás revelar lo que realmente piensas.
Habiendo sido herido tantas veces, ya no cree que pueda compartir sus pensamientos y sentimientos con nadie en su vida.
En cambio, atascas todo para que se solidifique debajo de la superficie.

6. Luchas con una fuerte sensación de lesión.
El miedo es difícil de superar y puede frenarnos en todas las áreas de nuestra vida.
En su caso, su miedo a sufrir lesiones está bien fundado, provocado por la repetida experiencia de ser traicionado y decepcionado.
Dejas que tu dolor y miedo controlen tu vida y te impiden abrir tu corazón a nadie.

7. Tiene dificultad para concentrarse y se distrae con facilidad.
Tus experiencias dolorosas dominan tus pensamientos y obstruyen tu mente. Esto hace que le resulte casi imposible concentrarse en algo.
Otros te ven inquieto, olvidadizo y distraído, pero no es tu culpa. No puedes evitar que tu mente divague.

8. Estás cansado de palabras como amor, confianza y lealtad.
Si bien estas palabras evocan sentimientos de amor, afecto y bienestar en la mayoría de las personas, ya no son válidas para ti.
Cada vez que alguien te traiciona o te lastima, poco a poco socava el significado de esas palabras en tu vida.

9. Entiendes cuánto puede doler este dolor, por eso te duele cuando ves a alguien pasar por lo mismo.
Usted sabe por experiencia propia lo difícil que puede ser romperle el corazón.
Cuando ves a alguien pasar por el mismo dolor en su vida, tu corazón siente por ellos.
Desearía saber el secreto de cómo quitarle el dolor.

10. Tiene dolor físico como resultado de su dolor emocional.
Si bien es obvio que está lidiando con un dolor emocional, a veces ese dolor puede manifestarse de manera física.
Es posible que tenga dolor en el pecho, dolor en el hombro, dolor de cabeza o cualquier otro dolor.

11. Luchas con tu ira y traes constante negatividad a tu vida.
Tienes tanta ira y frustración reprimidas por las lesiones que es difícil ignorar.
De hecho, su mente se siente como si estuviera bajo un ataque constante, una oleada de ira de la que no puede escapar.

12. Experimentas un ciclo constante de auto-culpa y odio.
Cada vez que piensas en cómo te lastimaron antes, no puedes evitar pensar en cómo podrías haberlo prevenido.
Cree que es responsable del dolor que ha experimentado. No importa cuánto lo intentes, simplemente no puedes perdonarte a ti mismo.

13. A pesar de sus mejores esfuerzos, no puede confiar en las personas.
A medida que su confianza se ha roto una y otra vez, sus ojos se han abierto al lado más oscuro de la humanidad.
Estás en un punto en el que no puedes deshacerte de la sensación de que todos te van a apuñalar por la espalda en algún momento.
Esto evita que pueda confiar en nadie.

14. Te derrumbas cuando estás solo.
Gastas tanta energía creando la ilusión para el mundo exterior de que estás bien.
Pero cuando el día llega a su fin y estás solo con tus pensamientos, todo vuelve a la normalidad.
En este momento estás completamente abrumado por tu dolor y por lo tanto colapsas por completo.